El Peleador
Por toda la comida que dejaste en el plato.
Por todas las palabras que dejaste de decir
Por todos los metros de escalada que dejaste de subir.
Si quieres nombrarme a mi comandante de tus ejércitos espirituales.
Yo me encargaré de:
Dejar los platos vacíos para no seguir derrochando recursos.
De hablar, también lo haré,
no dejaré ningún prisionero en la cueva de tú mente,
ni de la mía.
Secaré mi garganta a gritos.
Subiré por ti todas esas paredes,
metro a metro hasta la cumbre.
Pero recuerda, si es que lo deseas,
que nunca es tarde para dejar de derrochar
y gastar en cosas inútiles.
Que nunca es tarde para hablar con ese enemigo que dejaste atrás,
en el olvido.
Siempre es posible la paz.
Recuerda pichón, que nunca es tarde para volver a las montañas,
o donde sea para hacer tu camino.
Y sobre todo recuerda que con los años,
no te haces más joven,
sino todo lo contrario.
Roberto.Blasi
El Valle, Isla de Margarita. 09-01-2014
Por toda la comida que dejaste en el plato.
Por todas las palabras que dejaste de decir
Por todos los metros de escalada que dejaste de subir.
Si quieres nombrarme a mi comandante de tus ejércitos espirituales.
Yo me encargaré de:
Dejar los platos vacíos para no seguir derrochando recursos.
De hablar, también lo haré,
no dejaré ningún prisionero en la cueva de tú mente,
ni de la mía.
Secaré mi garganta a gritos.
Subiré por ti todas esas paredes,
metro a metro hasta la cumbre.
Pero recuerda, si es que lo deseas,
que nunca es tarde para dejar de derrochar
y gastar en cosas inútiles.
Que nunca es tarde para hablar con ese enemigo que dejaste atrás,
en el olvido.
Siempre es posible la paz.
Recuerda pichón, que nunca es tarde para volver a las montañas,
o donde sea para hacer tu camino.
Y sobre todo recuerda que con los años,
no te haces más joven,
sino todo lo contrario.
Roberto.Blasi
El Valle, Isla de Margarita. 09-01-2014