DESAPARECEN LAS GRANDES MASAS HELADAS
Por Roberto Blasi
En América del Sur y África, podrían derretirse en 15 años las grandes masas nevadas.
Son el primer signo de las consecuencias del aumento de la temperatura. Los datos, del geólogo Lonnie Thompson, reúnen veinte años de investigaciones. Muchos de los grandiosos escenarios naturales que conforman los glaciares y las cumbres nevadas de América del Sur y África tal vez queden en el recuerdo dentro de tan sólo 15 años, y poco puede hacerse para salvarlos, afirmó el geólogo Lonnie Thompson en una presentación realizada durante la reunión anual de la Asociación Americana para el Avance de la Ciencia, en Washington. El investigador, del Centro Byrd de Investigación Polar, perteneciente a la Universidad de Ohio, informó acerca de los resultados de dos décadas de estudios de su equipo de investigación, que controló los casquetes de hielo de América del Sur, Africa, China, el Tíbet y otros lugares del globo. Según Thompson.
En los Andes, la cubierta helada del monte Quelccaya, en Perú, se redujo por lo menos un 20% desde 1963. Por si esto fuera poco, el ritmo de retracción de uno de los principales glaciares que surge de allí, el Qori Kalis, fue 32 veces mayor en los últimos tres años que entre 1963 y 1978.
Para realizar su investigación, Thompson no sólo estudió los glaciares. El científico también analizó la presencia de dos formas atómicas del oxígeno -oxígeno 16 y oxígeno 18- que quedaron atrapadas en las masas de hielo extraídas de cuatro sitios de la meseta tibetana.
Según informa Earle Holland, en la comunicación difundida por la universidad, "cuanto más oxígeno 18 se detecta en una muestra de hielo, más cálidas eran las temperaturas atmosféricas en el momento en que se transformó en hielo la nieve caída".
El dato sirvió a Thompson para trazar una meticulosa historia de las temperaturas regionales, y los resultados no fueron nada alentadores.
Sobre los flancos del Xixabangma, un pico de 8014 metros ubicado sobre el borde sur de la meseta Tibetana, las muestras obtenidas del glaciar Dasuopu, de dos kilómetros de grosor, indicaron que los últimos 50 años fueron los más ricos en oxígeno 18 y, por lo tanto, los más cálidos de la historia de la masa helada.
"Predijimos que los primeros signos del calentamiento global aparecerían en los glaciares y picos helados de los trópicos. Estos hallazgos confirman esas predicciones", afirmó Thompson.
Los casos del Kilimandjaro en Africa y del Quelccaya en América del Sur parecen ser la evidencia más dramática. En el Qori Kalis, principal lengua de hielo del Quelccaya, el ritmo de retracción alcanzaría los 155 metros por año, tres veces más rápido que entre 1995 y 1998. El hielo derretido ha formado un gran lago frente al glaciar y, por primera vez en miles de años, ha dejado al descubierto la tierra desnuda.
Y entonces ¿sufriremos de los aludes?
Los aludes, por mala fortuna, están de moda. Será acaso un aviso aterrador del calentamiento de la tierra... Durante el año 2000 seis andinistas venezolanos sufrieron un accidente causado por un alud de placa en la cara norte del pico Humboltd. De los seis solo sobrevivió un escalador. Ahora hablemos de España, donde me encuentro viviendo desde hace cinco meses. En el Pirineo hace dos y tres años sí hubo algunos días muy peligrosos, así como en Sierra Nevada en 1995-96. Las terribles avalanchas de los Alpes no deben promover ninguna psicosis fuera de lo normal. En las pistas de esquí, por ejemplo, los riesgos son mínimos y controlados a diario. Fuera de las pistas y en la alta montaña empiezan los problemas. Cada alpinista debe tener un mínimo de conocimiento para valorar en cada salida su grado de exposición y salir informado siempre, del tiempo y del parte de aludes. La experiencia, el conocimiento del terreno y la prudencia son armas fundamentales.
Las cuestas con una pendiente de entre 28 y 58 grados situadas a más de 1.200 metros son susceptibles a padecer caída de aludes en caso de sobre acumulaciones de nieve. El viento que hace durante las nevadas, la cohesión de las diferentes capas de nieve y los cambios de temperatura del aire son los factores decisivos que desencadenan o no las avalanchas, unido a los caprichos del relieve y las laderas. Los aludes de nieve polvo se producen durante o poco después de las nevadas, con temperaturas inferiores a los cero grados. Van precedidos de una onda expansiva de aire, como un trueno que lo anuncia sin escapatoria y adquieren gran velocidad y capacidad destructiva. Tras de sí queda una especie de niebla helada que se diluye lentamente. Los aludes de nieve primavera-húmeda son los típicos de la primavera, con temperaturas superiores a unos cinco grados positivos, en general poco después del mediodía o la tarde. Suelen caer con el paso de esquiadores o alpinistas. Los aludes de placa se derivan de la fractura de una capa de nieve que se ha acumulado a sotavento de una cima, cerca de las crestas, que no se sostiene sobre la capa de nieve inferior.
Casos Particulares en América del Sur
Imagen del Chimborazo captado desde el Carihuairazo
Cráter del Cotopaxi
ECUADOR. donde cada montaña tiene su espacio y su encanto, su territorio, su ecosistema, su gente. Esto es lo que diferencia a las montañas de Ecuador de las del resto de Sudamérica y lo que las dota de un atractivo especial dentro de un entorno singular, diferente.
El Volcán Cotopaxi (5,897m), la montaña mas codiciada y concurrida de todo Ecuador y sin duda uno de los volcanes nevados más bellos del mundo. Siempre a presentado problemas relacionados con el sol y el calor. Se debe madrugar para escalarla, la mayoría de las jornadas se inician a las doce de la noche o incluso antes con el propósito de alcanzar la cumbre antes de las ocho de la mañana y estar fuera de la montaña mucho antes del medio día, hora en que el fuerte sol que resplandece en la Línea Ecuatorial calienta en exceso la nieve de la montaña y hace mas duro y peligroso el descenso. Las nubes con frecuencia aparecen rápidamente y la neblina lo cubre todo comprometiendo la visibilidad. Estas características se presentan y repiten a menudo en Ecuador. Es recomendable el uso de banderolas que señalen la cercanía de grietas y aseguren una retirada sin percances.
El Cráter del Cotopaxi es un espectáculo impresionante que supera todas las expectativas, alcanzar la cumbre en una mañana despejada se convierte en un recuerdo imborrable, una satisfacción mágica que te permite apreciar la perfección del Cráter y las sulfurosas fumarolas de vitalidad que emanan de las entrañas del Volcán. Según el señor Fernando Caballero Ex-Presidente de la Federación Peruana de Andinismo y Deportes de Invierno ¿Desaparecerá toda esta belleza en tan solo 15 años?
Ishinca y Ranrapalca, en la Cordillera Blanca, Perú.
PERÚ. Cordillera Blanca de Perú. Un lugar en el mundo donde coinciden en armonía el trabajo de Dios y la mano del hombre, un lugar que provoca la sensación de que el cielo es todo nuestro y que esta vez no se nos escapará.
Ishinca es sin duda una quebrada especial que ofrece al escalador el mas variado bufett de posibilidades, la zona de aclimatación más recomendable de toda la Cordillera Blanca de Perú con la sencilla ascensión de los nevados Urus (5495m) y Ishinca (5530m), la expuesta escalada del Tocllaraju (6032m), las rutas por abrir en los casi inescalados Palcarajus (Central 6274m, Oeste 6110m, Sur 5900) y el majestuoso Ranrapalca (6162m).
Disfrutar de estas montañas a lo largo de ocho días seguidos de buen clima –comenta Fernando Caballero- lo he tomado como un preciado regalo del señor de las montañas y me encuentro agradecido y satisfecho de haber aprovechado al máximo esta tregua en una temporada que justamente se ha caracterizado por un clima extraño e inestable. Si es cierto... cada año varían de forma dramática las condiciones de la nieves en este lugar único y ciertamente inolvidable. Recuerdo especialmente el ascenso al Urus durante octubre de 1999. Ya se había terminado la temporada de escalada y la nieve estaba bastante mala, casi derretida, en ocasiones nos hundíamos mi compañero Daniel Buss y yo hasta la cintura.
Ascendiendo al Tocllaraju. Perú
Laguna de Timoncitos, ascenso al Bolívar
VENEZUELA. En nuestro país también han cambiado las condiciones de la nieve. En los años 60 se celebró en la Sierra Nevada un campeonato de esquí. Pero en unos 15 años estas cumbres venezolanas podrían dejar de tener su hermoso manto nevado:
Pico Humboldt 4,952 m
Pico Bomplant 4,880 m
Pico Bolívar 5,007 m
Pico espejo 4,765 m
Y a la vez estas lagunas podrían aumentar sus niveles de agua debido al deshielo:
Laguna de timoncitos 4,600 m
laguna Verde 3,850 m
Laguna Coromoto 3,280 m
Todos los que alguna vez hemos escalado en la Sierra Nevada recordaremos aquella leyenda de las cinco águilas blancas. Leyenda que habla de las cinco cumbres nevadas de nuestros andes. Pues el Toro y la Garza, ya no tienen nieve desde hace muchos años. Y ahora les llega el turno de desaparecer a sus valientes hermanas. ¿Quedaran en el recuerdo esas bellas laderas cubiertas de nieve del Humboltd? El ascenso al Bolívar ya se ha convertido prácticamente en una escalada en roca por muchas de sus vias.
El agua, que pasará con el agua!!!
La pérdida de estos reservorios de agua helada representa una pérdida que va más allá de la actividad turística y el deleite de los alpinistas. "Amenaza las reservas de producción hidroeléctrica de la región, la irrigación de los cultivos y las reservas de agua para uso humano", advirtió el científico Thompson.
Para el investigador, los glaciares de altura representan algo así como una cuenta corriente para
Alimentar las necesidades de energía. Con su derretimiento y la creciente de los ríos, el gobierno está construyendo nuevas plantas hidroeléctricas. "Lo que están haciendo es usar la cuenta corriente que se creó durante miles de años y que, una vez vacía, no volverá a llenarse"
Fuentes:
Fernando Caballero -Ex-Presidente de la Federación Peruana de Andinismo y Deportes de Invierno- Revista Barrabes.
-Nota enviada por grupo GRAM de Rosario -Argentina- Artículo de La Naciónstrong>
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